lunes, 17 de septiembre de 2007

Y a dónde mueren los bits?

Sek Man Ng escribía su diario digital, el último post del 12 de Mayo último decía:

Today I missed my Japanese class again, since I have gotten a bad throat. I only went to the class once this week, so I am probably so far behind now. I will catch up in the summer tho so no worries hehe. Anyway today has been weird, at 3 some guy ringed the bell. I went down and recognized it was my sister's former boyfriend. He told me he wants to get his fishing poles back. I told him to wait downstair while I get them for him. While I was searching them, he is already in the house. He is still here right now, smoking, walking all around the house with his shoes on which btw I just washed the floor 2 days ago! Hopefully he will leave soon, oh yeah working on the jap report as we speak!

Contaba que había perdido una clase; que cuando había llegado a su casa 3 tipos tocaban su timbre, uno de ellos era el ex novio de su hermana...ahora estaba detrás de él fumando y ensuciando el piso que él había lavado dos días atrás, por suerte se iba a ir pronto.

Y a Sek Man Ng lo asesinaron y a su hermana también. El tipo que fumaba y se paseaba por su habitación con los pies sucios, mientras él escribía su último post. Y no había testigos, ni huellas, sólo quedaba ese último post de su blog perdido en la marea de bits muertos de la vieja Internet, y así la policía dio con el asesino. Otra historia más de la tecnología cruzándose con la vida y la muerte, y como todo, todo, va cambiando pero no nos damos cuenta

Ver su blog da escalofríos, los comentarios van por los cuatro mil y pico.

Una frase de Borges:
Sentí lo que sentimos cuando alguien muere: la congoja, ya inútil, de que nada nos hubiera costado ser más buenos

encadenamientos

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